Hace tanto tiempo que no comparto un artículo con ustedes. Les debo una disculpa, pero como le comenté a Yaro, una querida lectora de este sitio, en este momento mi camino de menor resistencia me ha llevado por nuevos rumbos y por un cambio de profesión que ha requerido toda mi energía y gran parte de mis vibraciones. Gracias a ella, y a JJ, otro lector, decidí publicar como artículo la respuesta que le di a él en la sección de comentarios.
Así que a continuación la transcripción de la misma. Una disculpa, por no haber dedicado el tiempo que normalmente le dedicaría a la edición de las lecciones publicadas, pero es por las razones antes mencionadas. Espero que esta publicación en crudo le sea de utilidad a quienes esperan pacientemente las lecciones de El Aprendiz de LOA.
Dicho lo anterior, esta fue la pregunta de JJ:

“Hola. Me encanta esta página, cuanto más la leo, más positividad y alta vibra me hace sentir. Todo está perfectamente explicado y hace entender como funciona la ley de la atracción de una manera muy distinta a como se muestra en otras enseñanzas. Me gustaría saber (y si pudieras explicarlo) en qué consiste esa fase 0 que no se nos enseña. ¡¡Saludos y felices manifestaciones!!”

Y he aquí mi respuesta para él y que comparto con todos ustedes ahora:

Me da mucho gusto que te sea de utilidad la información que comparto. Todos somos aprendices, y es bueno que nos ayudemos entre nosotros a entender mejor la ley más importante del Universo, pues a pesar de tantos libros y videos, es curioso que el porcentaje de los que ven un efecto similar a los de la película de “El Secreto”, sea probablemente menor al 0.000001%. Es decir, es más fácil ganarse la lotería sin hacer nada particular que tener un efecto impresionante aplicando las prácticas que nos enseñan los expertos de LOA. Expertos que, curiosamente, no tienen manifestaciones suficientemente constantes e impresionantes como para que realmente se autonombren como tales, ¿no crees?

Aún no sé si llamarle la fase cero, o qué otro nombre debería de usar. Se me ocurrió ese, o nivel cero, como referencia a una escena de kung fu panda, donde el oso panda Po le pregunta al maestro Shifu si podría comenzar con el nivel cero su entrenamiento, a lo cual le responde que no existe tal nivel . … hasta que ve practicar su kung fu a Po y el maestro decide que ¡acaba de encontrar el nivel cero con el oso Po!

Está bien motivarnos a aprender LOA al mostrarnos la posibilidad de ganar un millón de dólares en la lotería, o para manifestar un ferrari o una casa en la playa. Pero, con fines prácticos, hacerlo así termina decepcionando a muchos que no consiguen ver tales resultados, y ocasionando además que le hagan una mala publicidad a LOA como una fantasía que no sirve.
Debemos de ser suficientemente humildes como para saber que, como en cualquier área de conocimiento, se necesita mucho estudio y mucha práctica. Aunque, he ahí lo interesante: nos saturamos de prácticas y teorías que terminan cansándonos porque pareciera que no nos llevan a ningún lado. Y ahí mi punto: lo primero que debemos de dominar es la “no práctica”, la “no teoría”.
Porque la razón por la que no manifestamos lo que deseamos no se debe a una falta de esfuerzo o porque no estemos haciendo lo suficiente para manifestarlo, al contrrio, hacemos demasiado (y no de lo que estás pensando).
Asumiendo que entendemos lo que probablemente ellos no entienden, nos piden elevar nuestras vibraciones. Cuando antes debemos de aprender a apagar la mayoría de nuestras vibraciones actuales, no elevarlas. No entendemos que al apagarlas, de forma natural y sin que tengamos que hacer nada al respecto, vibraciones positivas surgirán que parecieran venir de la nada (lo cual no es así, vienen de un lado que en algún momento explicaré en un libro o en algún artículo).

El primer paso no consiste en manifestar cosas o eventos, por lo menos no aquello que hemos creído que es la manifestación. El primer paso consiste en convencernos de que el 100% del tiempo estamos manifestando como resultado de nuestras vibraciones. Y no me refiero a que nos convenzamos buscando el sentido o lógica o raciocinio que tiene esto, porque no lo tiene (no desde las creencias con que crecimos). Nos tenemos que dejar convencer por las manifestaciones del día a día que ocurren debido a LOA sin que estemos conscientes de ello. Lo haremos aprendiendo a encontrar la correlación entre la mayor cantidad de cosas que nos ocurren cada día y los pensamientos y atención que hayamos tenido antes, ya sea minutos atrás, o días.
Para conseguirlo debemos de ir tomando conciencia de “me pasó esto y hace un rato había pensado algo relacionado”. Y no me refiero a eventos increíbles, como encontrar dinero, o ganarse un premio, ni conocer al amor de nuestra vida. Me refiero a cualquier evento curioso, diferente y aparentemente insignificante que pudiera llamarte la atención como algo especial, por más pequeño que sea. Tómalo como un juego primero, sin juzgarlo, divirtiéndote con cada correlación que saques entre evento y pensamiento o tema al que le hayas puesto atención recientemente. Te recomiendo no compartirlo demasiado, porque suelen ser eventos y correlaciones tan sutiles que los demás probablemente lo minimizarán, y eso echará a perder el importantísimo y esencial nivel de confianza que estás adquiriendo en la relación pensamientos/vibraciones y manifestaciones/eventos. Sin el cual, tu capacidad de ser un manifestante poderoso será imposible.

Otro aspecto importante y básico que dan por sentado los “expertos de LOA” consiste en la manifestación más elemental, pero que probablemente sea la más poderosa, y quizás sobre la única que tenemos control. En gran medida es de donde surge el resto de nuestras manifestaciones, es el que nos muestra inconscientemente el camino que nos permite encontrarnos con nuestras manifestaciones “relevantes”. Me refiero a las ideas y pensamientos (en realidad existe algo antes que ello de lo cual no hablaré en esta ocasión). Creemos que las ideas son algo que nuestro ego construye, nos vanagloriamos de ellas, y ellos nos limita y las limita. Seamos honestos, la mayoría de la gente no tiene grandes ideas. Justamente porque las que tienen están limitadas a ese ego (le llamo ego en este momento para simplificar la explicación).

¿Por qué no tenemos grandes ideas? porque no permitimos su manifestación. Le tememos a las grandes ideas, porque le tememos a las ideas ridículas, y las grandes ideas surgen del mismo lugar que las ideas absurdas. Borramos al juzgar cualquier idea que desde lo que hemos aprendido parezca ridícula o absurda. Y entonces cerramos los canales de comunicación con nuestro ser interior, el Universo, Dios, subconsciente, intuición hacia nuestro ser físico… Limitándonos así a las ideas triviales, superficiales e intrascendentes generadas por vibraciones bajas que nos esmeramos en mantener activar y perdiéndonos de las ideas grandiosas … sean minúsculas, pequeñas, medianas o grandes. Sin saberlo, nos perdemos de aquellas que nos llevan a cada microdecisión de cada minuto de nuestra vida y que encadenadas nos llevan “por arte de magia” a lo que creemos es una manifestación instantánea.

Pero, no hay manifestaciones instantáneas, son el camino o resultado de ideas continuas y generalmente imperceptibles o subconsciente que provienen de “no sabemos dónde” que nos hicieron recorrer diferentes caminos a lo largo del tiempo, ya sea corto o largo, hasta encontrarnos con lo que sabíamos o no, que era nuestro deseo y por lo tanto nuestra manifestación.
Los expertos nos mencionan que debemos de tener pensamientos positivos para poder obtener nuestras manifestaciones. Quiero que quede muy claro que yo no hablo de eso, sino de algo muy diferente. Yo hablo de manifestar en primer lugar los pensamientos. … no de fabricar pensamientos, simularlos, razonarlos, inventarlos, ni esforzarmos por tener pensamientos positivos. Me preocupa que te confundas al respecto, pues no es poca cosa la diferencia.
Yo hablo de la manifestación, si quieres llamarle subconsciente, de ideas y pensamientos que la mayoría de las veces te pasan desapercibidas, y que son las que a final de cuentas son las responsables de la vida que tienes y tendrás, o si quieres llamarle así, de la vida que has manifestado. Ideas y pensamientos que requieren no un esfuerzo de nuestra parte y ponernos creativos, requieren la apertura de un canal hacia tu parte divina.

Así que, como breve y simplificada conclusión, dentro de esta fase cero de la que hablo, está:

• en primer lugar aprender a tomar conciencia constantemente de la relación entre los eventos pequeños de nuestro día, con los pensamientos o atención que hayamos tenido recientemente.
• Y en segundo lugar, ayudados por el punto anterior nos irá llevando de forma natural hacia allá, hacia la apertura del canal de comunicación con nuestras ideas absurdas, que irónicamente es el mismo canal hacia nuestra eterna fuente de ideas grandiosas. Ideas conscientes y subconscientes, como la forma principal en que nos encontraremos con lo que típicamente llamamos manifestación de nuestros deseos.

Esto es de una forma breve y rápida algunos conceptos relacionados con esa fase cero de la que hablo. No creo haber podido transmitir el poder de estos dos conceptos en tan pocas palabras. Y espero no haberte confundido más. Mi intención es escribir un nuevo libro para explicarlo mejor, junto con los ejercicios para poder hacer esto. Pero, mientras tanto, y debido a que lo preguntaste, hice lo mejor que pude dada mi limitación de tiempo.

Gracias por preguntar, y felices manifestaciones JJ

El Aprendiz de LOA

¿Qué te pareció? Como se lo expliqué a JJ, este texto rápido y sin editar no puede hacerle justicia a lo que considero pueden ser los conceptos más importantes que he aprendido últimamente sobre LOA. Por lo que, espero poder compartir más adelante algo mucho más completo y práctico al respecto, sea en un libro o el algunos artículos.
Mientras tanto, espero que haya muchas personas que lean este adelanto y me den sus comentarios y opiniones. No tengo otra forma de saber si lo que comparto le llega a suficientes personas como para que valga la pena usar mi tiempo en publicar artículos. Así que, si lo leíste, por favor pon un comentario. Por lo menos un hola, para saber que estás ahí. Mejor aún, coméntame si estarías interesado en un libro donde explicara más a fondo este tema. ¿Quién sabe? Si hubiera suficiente gente interesada quizás me motivaría a escribirlo pronto 😉

¡Felices manifestaciones!

El Aprendiz de LOA